Mientras estaba en el corral de su finca, donde estaba dándole comida a sus animales, fue asesinado un campesino a las 5 de la tarde del miércoles, en zona rural de Ponedera, en el sur del Atlántico.

La víctima fue identificada por las autoridades como Pedro Rafael Barcas Mena, nacido hacía 66 años en el municipio de Córdoba, en el departamento de Bolívar, de donde llegó hacía 17 años. Recibió un disparo en la espalda. Vivía con su esposa, Sandra Miranda, y tenía siete hijos.

La esposa del fallecido contó que desde la madrugada se iba a su parcela, la que tenía desde hacía tres años, llamada La Gloria de Dios, donde cultivaba yuca, tenía gallinas y unas seis vacas. Durante el día se mantenía cuidando sus animales y la tierra, y al final de la tarde regresaba a su casa.

Miranda contó que en septiembre del año pasado lo habían atracado pero que en general el sector es muy tranquilo, donde personas, como la víctima, se dedican a labrar la tierra, por lo que el homicidio le resultó muy extraño.

Según la información de la Policía del Atlántico, un testigo contó que escuchó a Pedro Rafael Barcas Mena gritar que lo iban a atracar. El hombre se asomó y vio al atacante vestido con una camisa azul manga larga, corriendo detrás de la víctima y le disparó, impactándolo en la espalda.

El testigo trató de acercarse y el atacante le dijo que no se metiera, que él sólo iba por la escopeta y le apuntó con una pistola para ahuyentarlo. Luego el pistolero salió corriendo y se internó en la maleza.

Familiares indicaron que Pedro Rafael Barcas Mena no tenía problemas ni sabían que tuviera amenazas.